Ingredientes
que aportaran a nuestra receta en la vida cotidiana que debe ser aplicado constantemente
con firmeza y ahínco a fin de crecer personalmente y optimizar nuestro
potencial.
Debemos darnos la oportunidad de acrecentar nuestros conocimientos en los distintos roles que representamos priorizando expectativas en que enfatizar, habrán también oportunidades donde uno desfallece ante el mas mínimo error por lo que el desaliento muchas veces se apodera dejándonos vulnerables y expuestos al temor de rendirnos, sin embargo, es aquí donde nace nuestro optimismo aquella que nos mueve en este camino dulce pero inhóspito también, la cual nos ayuda a reencauzar nuestros propósitos de vida con entusiasmo.
Reconocer
nuestras debilidades es un camino que nos orienta, así como nuestras fortalezas
nos van mostrando las posibilidades de
éxito, ser entusiasta, es decir,
reconocer con ánimo aquello que nos causa interés y placer o el optimismo
que nos aporta el poder juzgar y valorar desde una perspectiva más positiva,
ambos tan ligados a nuestro crecimiento personal constante, movilizan y
sostienen nuestras expectativas ayudándonos a trascender. Una anima y motiva,
la otra nos impulsa.
Psicología clínica |
Todo
los que nos resulta nuevo siempre nos dará miedo, pero no hay valentía que nos
movilice si no hay miedo, es una herramienta útil e irreversible.
FIORELLA PORRAS PORTILLO
PSICÓLOGA