LOS SABIOS ENCUENTRAN BELEN

Por Roberto Carlos QUINTANA VILLAVICENCIO
Lic. en filosofía

Los sabios son personas lucidas, cultas e ilustradas; anticipan los escenarios sociales, predicen las conductas económicas, prevén los conflictos y por supuesto vaticinan “las buenas nuevas” antes y ahora existen esas personas, que si son reyes lo son de la sabiduría, antes los prejuiciaban como “magos” pero eran científicos sociales, por eso que Gaspar, Melchor y Baltazar sabían de antemano como muchos sabios de su tiempo lo que había que acontecer: el nacimiento de un mesías, un reformador y reparador de senderos ideológicos.

Los sabios ubicaron la estrella que los guio a Belén, ese villorrio despreciado donde decían los romanos ¿que bueno podría salir de allí?, sin embargo recuerden que del lodo social salen los genios, de la masa ignota salen los rebeldes, del capullo horrendo sale la belleza nacional, y de Belén y en Belén nació Jesús.

Y en esos días para los sabios ver al reformador en su cuna, sostenerlo en sus brazos al que iba a ser el revolucionario social más grande de todos los tiempos era sin duda alguna la oportunidad de sus vidas, era tremenda experiencia sentir y vivir esa hecho.

Cuando uno prevé que algo así pasaría de hecho uno debe llevar presentes a los padres, sucede en cada “babi shower”, en cada nacimiento, se llevan regalos, dadivas y obsequios, la gente normal regala cosas, artefactos y enseres, que son en el fondo simples, así cuesten miles o cientos de soles las cosas, pues estos enseres y artefactos representan la dictadura del consumismo campante que los seres corrientes y comunes hacen estos días de navidad y en el año.

Los sabios en cambio le llevaron al niño Jesús oro, mirra e incienso, no le dieron su “carro 4x4” , o su “play station 4”, o su “Tablet”, como sabios ellos sabían que ese tipo de objetos son escuetos, regalos lacónicos y secos, que solo sirven para la distracción y el entretenimiento del individuo.

Los sabios le entregaron a José y María oro para el niño, para su formación, educación y sostenimiento de lo integral en el niño, el oro serviría para ello, para mantener una alimentación sana, una educación libre y medios y materiales que hagan de la preparación del niño óptima para su misión en la vida, por eso padres no duden invertir en sus hijos, prioricen siempre ello.

Los sabios le dieron a José y María Incienso que es un aroma agradable, destella esperanzas, oxigenación moral en un mundo estresado, Jesús de niño, de adolescente y joven fue ello, emanaba se dice de Él un aroma de esperanza, de agrado espiritual y de profunda anímica que impulsaba con su mensaje de paz y amor esa vitalidad social que reconforta a las personas.

Los sabios le dieron a José y María mirra porque conocían el final del niño, sabían cuál era su destino marcado por las profecías, y le entregaron a sus padres como consuelo anticipado de los sufrimientos mirra; los sabios conocían que Jesús padecería cuando postularía sus preceptos de reingeniería social y con su vida practicaría el servicio, el amor a los enemigos y el sacrificio por los seres humanos.

Si has de regalar estos días, dota para el futuro, concede regalos para los días felices y para los días enjutos, estos de hoy, de hecho son días felices, de celebración, de encuentro, de recordar el nacimiento de aquel que quiso amor en un mundo de odio, que quiso perdón en un mundo lleno de culpables, que quiso reconciliación en un mundo donde el enemigo es eterno.